viernes, 14 de octubre de 2011

Introducción.

El presente blog, del equipos “Los Emigrantes” del quinto semestre en Ciencias de la Educación, Cátedra “Liderazgo Educativo”, facilitada por el Dr. Eustiquio Aponte, no es más que una ventana audiovisual propicia, para asomar opiniones de sus integrantes, acerca de elementos constitutivos del liderazgo, usando esta modalidad como recurso pedagógico.
De esta manera, compartimos opiniones, enlaces y/o imágenes, que los integrantes consideramos pertinentes, a fin de darle pertinencia a este espacio, que se aspira deje una huella positiva a quién le visite.
De esta manera, les invitamos a pasar adelante, revisarlo y emitir los comentarios que tengan a bien, en función de enriquecerle.
Siéntanse como en su casa, y a pesar de ser nuestro fuerte emigrar, encontraremos la forma y manera, de ser buenos anfitriones.
Un abrazo cariñoso, de parte de:

Ana María Pérez
Maximina Ruiz de Morillo
Neydis Rojas
Néstor Rojas

Presentación.

Este es un espacio que desea aproximarse a sus visitantes en forma pedagógica, trayendo opiniones, imágenes y link o páginas electrónicas pertinentes para contribuir a diversificar la importancia del liderazgo, especialmente en el campo educativo.
De esta manera, les presentamos un producto realizado con cariño, a fin de dar a conocer el pensamiento del equipo “Los Emigrantes” sobre aspectos destacados del tópico vital en que se convierte el “Liderazgo Educativo”, a fin de contribuir a la sana discusión pedgogica, sobre el mismo.
Por consiguiente, no esperen más…visítenos e intercambie apreciaciones que servirán para ayudarnos a mejorar…
Con cariño:
LOS EMIGRANTES…

Nuestro logo.

Una visión cercana de James Hunter y Joel Berker.

Por: Ana María Pérez.
El planteamiento central del texto es el liderazgo. El autor lo plantea utilizando diferentes voces y figuras emblemática de diferentes profesiones con el fin de expresar que el liderazgo es más que una tendencia, es una forma de vida y es uno; sus características y principios se aplican en cualquier escenario de la vida bien sea personal o profesional.
Para precisar aspectos interesante comienzo por indicar la definición del concepto liderazgo como un acto de mera curiosidad, en este caso encontramos una definición intencional la cual deja por fuera la tendencia actual respecto al uso de conceptos u expresiones con fines operacionales lo que propicia una polisemia, referenciando una visión en ocasiones vacías. Quizás a mi modo de ver en una definición teorética con una sabia intención de referirse a un modelo. Sin embargo es solo eso una terrible curiosidad.
Otro aspecto curioso es el número de participantes en el seminario, seis personas que están cercanos pero absolutamente distantes en cuanto a intereses, gustos, concepciones del mundo, de profesiones con oficios distintos; cada uno con sus consideraciones acerca del liderazgo. Se realiza esta reflexión utilizando criterios de la numerología, el seis (6) representa la búsqueda de la comunidad, la armonía, el amor, la belleza y de equilibrio. Para la numerología bíblica el seis (6) representa incompletud, imperfección, tras la búsqueda del siguiente número de la perfección. El facilitador o tutor del seminario sumará la posibilidad de completar el número perfecto, de esto último se puede expresar que se refiere al número del maestro, a la sabiduría para que los participantes logren las características señaladas por la numerología para el número seis. El logro de la armonía, la belleza, el amor, equilibrio. Un dato que corrobora la búsqueda de la perfectibilidad se muestra en el número de días que permanecerían en el monasterio, siete (7) días, tampoco es extraño que sean siete (7) los capítulos del libro.
La intención de autor quizás sea establecer el liderazgo como una visión de tendencia perfectible cuyo sentido no sea otro que una metamorfosis constante hasta llegar a convertirse con su obra en un visionario del cambio, probablemente esta le permitirá siempre adelantarse al cambio y cambiar de paradigma antes de ser sorprendido por otro nuevo paradigma. Esto se asocia al planteamiento de liderazgo y la imperiosa necesidad de comprenderlo y vivirlo desde un constante cambio.
La primera parte del texto muestra un desgate del liderazgo de los asistentes al retiro en el seminario. La falta de autoridad, la carencia de principios y un servicio pobre, refleja paradigma en decadencia y poca confianza para atreverse a cambiar. Estos personajes reflejan una expresión más bien negativa y en decadencia. Para Hunter el liderazgo “es el arte de influir sobre las personas para que trabaje con entusiasmo en la consecución de los objetivos en pro del bien común”. Esta influencia permite al liderado reconocer la autoridad el líder. De allí que el texto refleje la diferencia entre gestionar y liderazgo, el primero plante que la gestión va hacia las cosas y el liderazgo busca liderar. Un personaje interesante es el que simboliza el liderazgo, Simeón
El monje Simeón es una figura emblemática en la obra, representa la sencillez, la confianza, el equilibrio, es un modelo, un líder cuyo fin es servir, honrado, digno de confianza, ejemplo de servicio, pendiente del otro, exige cumplimiento de las responsabilidades de la gente. Toman en cuenta las relaciones humanas y las tareas asignadas. Un líder que transformó su vida en servicio y sacrificio por el otro, basado en el ejemplo. Con una gran voluntad, y actitud de obediencia hacia su fe.
Puede expresarse además, que en la primera parte del texto se refleja la visión de futuro presente en la obra y la propuesta de cambio antes del derrumbe, se percibe una muestra más de este planteamiento de allí se desprende una comparación en el sentido del objetivo final de la obra al igual que la obra de Joel Berker, el paradigma, su planteamiento central es mirar hacia delante, es adelantarse a los cambios para conocer los efectos del cambio en el quehacer humano.
El interés del autor va hacia la investigación constante esta le permite ir construyendo el presente arrancándole posibilidades a la tecnología para administrar información que le servirá para cambiar de paradigma antes de que este se convierta en un problema, o no de respuesta a las necesidades de liderazgo de las organizaciones. Ninguna organización u empresa superará la crisis sino se adapta a los cambios. Y al cambio que se refiere es al traslado de la información en conocimiento como mecanismo de acción diaria. Y los problemas son atacados para solventar y/o convertirlos en nuevas oportunidades. Ahora la meta es la acción constante en palabras de Berker, J. “una visión sin acción no pasa de un sueño. Acción sin visión solo es un pasatiempo, pero una visión con acción puede cambiar el mundo”.
Y son los paradigmas los que impide que esa visión se convierta en acción, los paradigmas son reglas que se imponen en nuestras vidas y no nos dejan tener éxito, para lograrlo hay que romper límites y reglas, asumir estas últimas para resolver problemas exitosamente, muchas veces es necesario distorsionar los paradigmas en aras del éxito de la empresa. El efecto del paradigma, se alcanza cuando este ciega a los empresarios frente a las nuevas oportunidades y sufren de parálisis paradigmática que causa el detenimiento de una organización, se observa una obstaculización de estrategias efectiva para lograr un avance a nivel gerencial.
Que se aspira con este planteamiento que haya una revisión de los conceptos, de las formas de liderazgos, una resignificación de la visión hacia el cambio, que se tomen en cuenta nuevas formas de pensar y actuar, para comprender el planteamiento que del cambio de paradigma es necesario vencer lo negativo y comenzar a aprender una visión positiva de la vida y las cosas para que pueda impactar en el ámbito empresarial y profesional del individuo.
Fuentes:
Berker, Joel “Paradigma” HarperBusiness, 1993
Hunter, James: “La Paradoja”. Ediciones Empresa Activa. Madrid. 2001.
http://numerologia.sermasyo.es/significado-del-numero-6-responsabilidad-armonia-y-bienestar/
http://www.sociedadycultura.com/2011/10/significado-del-numero-6.html
http://forocristiano.iglesia.net/showthread.php/31443-La-numerolog%C3%ADa-b%C3%ADblica-y-el-significado-de-los-n%C3%BAmeros-1-al-10

miércoles, 12 de octubre de 2011

“LA PARADOJA”.


Por: Néstor Julio Rojas Pocaterra.
Inspirado en la imagen de dos grandes figuras de la historia, como indudablemente son nuestro señor JESUCRISTO, guía espiritual de la humanidad y el Libertador Simón Bolívar, ferviente partidario de la LIBERTAD humana, los cuales LIDERARON CON EL EJEMPLO.
Es importante recordar que etimológicamente la palabra “Paradoja” está referida a: “una idea extraña u opuesta a la común opinión y al sentir de los seres humanos”. Por lo cual, en palabras simples, es “lo opuesto a lo que uno considera cierto”. Convirtiéndose en una declaración en apariencia verdadera que conlleva a una auto-contradicción lógica o a una situación que contradice el sentido común.
El texto, busca dar respuesta a muchas preguntas formuladas, referidas a: ¿Cualidades necesarias para ser un buen jefe?, ¿forma como se consiguen la autoridad y la credibilidad necesaria para dirigir de forma efectiva?, así como nos recuerda los principios universales que nos permiten colaborar con los demás en el trabajo o en el hogar.
En su prólogo, la obra: Narra la historia de la vida del ejecutivo JOHN DAILY, Director de una importante instalación industrial, con más de 500 empleados y facturación anual superior a 100 millones de dólares. Este ciudadano, además había sido el director más joven en la historia de esa empresa, con gran autonomía para la toma de decisiones y poseedor de un sueldo considerable, que le permitía disfrutar junto a su familia de al menos 2 vacaciones al año, poseedor de un yate, carros nuevos, una casa de campo, una moto acuática, el cual por si fuera poco, estaba en capacidad de ahorrar sumas significativas de dinero para un futuro. Alguien realmente solvente desde el punto de vista económico.
Pero, de un momento a otro a John se le enredo la vida: su esposa, Rachel profesional de la psicología no era feliz, su hijo John (adoptado por la pareja por problemas previos para concebir) se convirtió en un niño contestón y rebelde, su hija Sarah en un niña triste y solitaria; debido fundamentalmente a que John no tenía tiempo o valor para expresar sus sentimientos. Esa situación, se repetía en su trabajo y hasta en el equipo de béisbol menor que dirigía, lo cual tornó a su vida en sumamente complicada en cuanto a sus relaciones personales, por lo cual, a pesar de su holgada situación económica se había convertido en un ser triste y taciturno, como que si todo el mundo le fastidiara e incluso su propia forma de ser, sin embargo se las arreglaba para engañar a todos excepto a su esposa, psicóloga al fin, quien lo convenció para que conversara con el pastor de la parroquia.
Ese hombre de fé, le recomendó pasar unos días solo y tratar de aclarar las cosas por lo que le sugirió acudir o recluirse en un monasterio cristiano donde habían 33 monjes dedicados a tres prioridades: oración, trabajo y silencio. En principio, a Daily no le interesó pero cuando ya se marchaba el pastor le informó que uno de los monjes era un ejecutivo exitoso llamado Leonard Hoffman lo que le llamó grandemente la atención, para que coincidente con esta recomendación, al llegar a su casa su esposa le conto que vio en televisión un programa sobre hombres y mujeres de negocios que hacían retiros espirituales para ordenar sus vidas, lo cual le permitió decidirse a ir al monasterio, atraído por la presencia allí del exitoso ejecutivo transformado en monje.
Además de los personajes nombrados hasta ahora, la obra incluye los siguientes: Padre Peter. El Abad James. El Hermano Andrew, un servidor en el monasterio. Lee Buhr: pastor Bautista. Greg: sargento del ejército. Theresa: directora de escuela, hispana. Chris: entrenadora de equipo de baloncesto. Y, Kim: enfermera jefe de hospital maternal.
Destacan en la obra, las siguientes FRASES PARA SER BUEN LIDER: No hay autoridad sin respeto. El respeto no se funda en la imposición ni en el miedo, sino en la integridad, la sinceridad y en la empatía con el prójimo. No podemos cambiar a nadie, sólo podemos cambiar nosotros mismos. Y, el trabajo lo hacen las personas y no puede hacerse un buen trabajo sin cuidar las relaciones humanas.
Por otra parte, cómo CARACTERISTICAS DE UN LIDER, surgen las siguientes: Es importante tratar a otros como desearías ser tratados, el famoso: “no hagas a los demás, lo que no quieras te hagan a ti”. La Puntualidad. La Capacidad para dirigir y motivar. Estar abierto a los cambios. Para mandar hay que servir primero. Satisfacer a los clientes. Espiritual e integro. Alegría de vivir. Ser humilde y cortés. Tener fortaleza y sabiduría. Mirada limpia y penetrante. Ser receptivo y respetuoso. Trasmitir espíritu y energía. Reconocer los errores. Mejorar continuamente. Sacrificarse por los demás. Tener voluntad, paciencia, experiencia, vocación de servicio, poder de decisión, esforzarse. Disposición para el aprendizaje. Identificar y satisfacer las legítimas necesidades de su gente y quitar todos los obstáculos para que se sirva al cliente. Que lleve a cabos las tareas fomentando las relaciones humanas. Trato digno y respetuoso con los demás. Y, cambiar los viejos paradigmas.
La obra se desarrolla en 7 capítulos, los cuales son: 1) LAS DEFINICIONES: El cual considera a la CONFIANZA como la palabra clave para que las relaciones funcionen; 2) EL PARADIGMA ANTIGUO: Que desarrolla la idea de que EL LIDER debe dar lo mejor de sí mismo para su organización, invirtiendo la pirámide, a fin de que emerja el nuevo paradigma; 3) EL MODELO: Que considera que el mayor líder, es el que más ha servido, por lo cual LIDERAZGO implica: identificar y satisfacer las necesidades; 4) EL VERBO: Que señala que EL AMOR no consiste en lo que sientes por los demás, sino en lo que haces por ellos. Es decir, aquello de que “OBRAS SON AMORES”; 5) EL ENTORNO: El mismo se resume, en que debemos rodearnos de personas competentes, para lo cual debemos propiciar la presencia de un ambiente adecuado y la necesaria presión, de forma que la gente pueda elegir: cambiar y crecer; 6) LA ELECCIÓN: Conduce a que las ideas se convierten en actos, los actos en nuestro carácter y este en nuestro destino, es decir somos constructores de nuestro destino; 7) LOS RESULTADOS: Ese elemento fundamental de toda obra, nos lleva a considerar que no podemos seguir haciendo lo mismo y esperar resultados distintos.
La obra nos conduce, a nuestro entender, a disipar la confusión existente entre los binomios: AUTORIDAD Y PODER versus RESPETO Y MIEDO. En particular, considero que más que AUTORIDAD, el líder debe desarrollar AUTORICTA, es decir: El prestigio necesario, para que aun sin tener el poder en sus manos, se pueda dictar cátedra con sus palabras y acción, convirtiéndose en una referencia paradigmática necesaria a consultar. Asumiendo AUTORIDAD MORAL.
Por todo ello, el BUEN LIDER debe estar pendiente de sus subordinados, para LIDERAR con el EJEMPLO. Lo cual conlleva a la siguiente reflexión: “Para ser un
buen líder se debe lograr que AUTORIDAD y RESPETO, desplacen al binomio poder y miedo, que conduce a la aparición de la funesta “DOBLE CARA” usada por muchos para enmascararse.”
Para concluir, considero, que un BUEN LIDER, debe hacer constante y permanente auto-reflexión. Desarrollando sus sentidos, a fin de que quienes estén bajo se liderazgo, actúen con la contagiante energía que conlleve a homologar: TRABAJO con PLACER.

La Influencia de los Paradigmas en el Liderazgo


Por: Neydis Janeth Rojas Agüero

Hunter (2001) señala que el liderazgo es “el arte de influir sobre la gente para que trabaje con entusiasmo en la consecución de objetivos en pro del bien común” (p.38), es así que para que el líder logre esta influencia debe trasmitir su compromiso de servicio para el bienestar del personal y de la organización, de igual importancia es el de tener ideas, modelos o paradigmas claros, el saber hacia dónde va, cómo, donde, qué y por qué, adquiere seguridad y confianza en todas las personas involucradas en el proceso, ganándose el apoyo, el que compartan sus ideas y se comprometan a trabajar para cambiar la realidad.
Joel Barker afirma que cada cambio genera nuevos cambios, algunas personas se pueden sentir frustradas porque cuando se han acostumbrado a un cambio viene otro y otro, sin embargo otras tienen la capacidad de acostumbrarse fácilmente a los cambios e innovaciones que tienen gran influencia en nuestra vida. En los últimos años los nuevos paradigmas se han convertido en el concepto clave para entender el cambio, los paradigmas se basan en patrones de comportamiento y las reglas que rigen dichos patrones, dichos patrones nos dan limites en nuestras profesiones, trabajo, ritmo de vida, en todo lo que hacemos, nos sirven para resolver los problemas. Sin embargo los paradigmas no pueden transformarse en inflexibles, ya que se perdería la capacidad de tener visión futurista, romper viejos esquemas y crear o innovar nuevos cambios.
Barker y otros autores comparten que el trío anticipación, excelencia e innovación le permiten a cualquier organización lograr el éxito, ya que se les abre el abanico para poder predecir las necesidades de los clientes, innovar los productos o servicios requeridos para satisfacerlos y producirlos en forma agraciada; sin embargo, aquí se resalta una frase, de Peter Druker, muy conocida en el Liderazgo “Un gerente que no sepa anticipar no sabe gerenciar”.
Muchos de nosotros, al ejercer cargos de gerentes o líderes en nuestras organizaciones no sabemos anticipar, y NO es nuestra culpa. En general tenemos grandes habilidades para resolver problemas cuando se presentan. Existe una buena razón para este comportamiento, se nos paga para resolver problemas, así que eso es lo que hacemos.
Naranjo (2009) explica que “el problema es que comprender que uno debe anticipar no nos explica cómo hacerlo.” (p.22). La buena anticipación es el resultado de una buena investigación, es necesario hacer una exploración estratégica, parte de la anticipación es científica, la práctica (y la persistencia) hacen al maestro.
Adam Smith, en los Poderes de la Mente afirma que un paradigma “nos explica el mundo y nos ayuda a predecir su comportamiento“. Así como que “cuando estamos en medio de un paradigma es difícil imaginar cualquier otro paradigma”
Es por lo anterior que el líder de hoy debe vivir en constantes “cambios paradigmáticos”, abierto a la creatividad, innovación, actualización, en todas las áreas de interés: social, económico, político, cultural y educativo. Las organizaciones que llegan a la cima del éxito no deben conformarse o estancarse con lo logrado, ya que corren el riesgo de derrumbarse en muy poco tiempo, por lo acelerado de las técnicas de comunicación, el progreso de la tecnología, lo que conlleva a una alta calidad en los procesos de la competencia, no debemos perder la perspectiva que coexistimos en una economía globalizada y digital que no permite que las empresas se hundan en una “parálisis paradigmática”.
Es de considerar los puntos claves, según Barker, para cambiar un paradigma:
• La verdadera responsabilidad del líder
• El modo de encontrar solución a los problemas que parecen “imposibles”
• Cómo descubrir las olas de los nuevos cambios
• El papel especial de cada persona durante el cambio

LA PARADOJA DE UN PARADIGMA O


Por: Néstor Julio Rojas Pocaterra.

En atención a las instrucciones de la Cátedra, basados en la lectura de los capítulos I y II de “La Paradoja” de James Hunter y III y XII de “Paradigma” de Joel Barker, articulados con conceptos como: Liderazgo, Poder, Autoridad, Paradigmas, Gerente, Líder, Nacimiento de un Paradigma, Cambios Paradigmáticos, entre otros surge la presente reflexión, en una aproximación teórica a lo que el autor vislumbra como la paradoja de un paradigma o lo paradigmático de una paradoja.
Recordemos que paradoja se refiere a una idea extraña u opuesta a la común opinión y al sentir de los seres humanos, convirtiéndose en sentido práctico en lo opuesto a lo que consideramos cierto. Por otra parte, paradigma en su más sencilla interpretación, viene a ser el significado o resultante del término: “Modelo”.
De esta manera, la interacción de estos dos (02) conceptos, de la mano de los arriba involucrados, nos lleva a imaginarnos la paradoja de un paradigma o lo paradigmático de una paradoja, que no es más que abrirnos al cambio.
Partimos de colocar en plano, las referencias a los documentos bases para esta reflexión: “La Paradoja” y “Paradigma”, especialmente los capítulos de las mismas, sugeridos por la cátedra. De allí se desprende sucintamente, que en cuanto a:
- “La Paradoja”: El Capítulo I, “Las Definiciones”, considera a la CONFIANZA como la palabra clave para que las relaciones interpersonales funcionen efectivamente; mientras que el Capítulo II: “El Paradigma Antiguo”, conlleva a desarrollar la idea de que el LIDER debe dar lo mejor de sí mismo para su organización, en busca de invertir la pirámide, a fin de que emerja el nuevo paradigma.
- “Paradigmas”: en sus capítulos III y XII, nos relata como muchos ni siquiera sabían pronunciar la palabra “Paradigma” hace casi tres (03) décadas. En la obra, Barker transita por diversas conceptualizaciones del término, de la mano de: griegos antiguos, y autores como Thomas Kuhn, Adam Smith, Willis Harmon y Marilyn Ferguson, para esbozar su apreciación acerca del mismo. De esta manera, parafraseando a Barker, un “Paradigma”, es algo así como: el conjunto de reglas y disposiciones escritas o no, que conlleva a hacer las siguientes dos cosas: establecer o definir límites e indicar como comportarse dentro de los límites para tener éxito.
Realizadas estas precisiones, cuál metafórico “aprendiz a chef o cocinero”, colocaremos los ingredientes necesarios para tratar de interesar al lector, acerca de “La Paradoja de un paradigma” o “lo Paradigmático de una Paradoja”, que más allá de un juego de palabras, permita recordarnos que transitamos un momento histórico llamado postmodernidad, caracterizado por relatividad e incertidumbre, según la cual no todo lo que parece es, ni todo lo que es parece.
Antes de que se me acuse de “enajenado”, “payaso” o “egocéntrico”, como a muchos les atrae calificar a lo que no comprenden o comparten, debo decirles que, considero que el problema central de los seres humanos, radica en considerarse propietario de verdades absolutas, por lo cual, en nuestra tradicional formación lineal, positivista o cartesiana, estamos demasiado acostumbrados a un orden, razón por la que cuando nos lo cambian, nos incomodamos. Según criterio de este autor, porque cual “niños malcriados” consumimos en nuestros años de “oro” en cuanto a formación, grandes dosis de “nutrientes teteros” contentivos de la fórmula: “Resistencia al cambio”, que nos convirtieron en seres dogmaticos, a veces intolerantes.
Esta realidad pensamos se fragmento, cuando el gran Albert Einstein, enuncio la ley de la Relatividad, sentenciando que “todo era relativo y por tanto nada es absoluto”. De allí, la necesidad de que “mi verdad” se contraponga a “tu verdad” y a “las verdades” de los intervinientes a fin de “consensuar” a fin de que emerja la “verdad compartida”. En un sueño romántico de mucha paciencia, lamentablemente aún lejano de ser posible.
Queremos decir todo esto, en virtud de que consideramos que para cambiar “paradigmas o modelos”, el líder o gerente debe poseer: autoridad, autoricta y un poder dosificado con una práctica de accionar a través del ejemplo.
Quien tenga esas cualidades, podrá liderar y trascender dentro de la organización en la que participe, convirtiendo la paradoja de un paradigma, en el paradigma de una paradoja.
Si no les convenció mi verdad relativa, no teman: no les dejaré de hablar, ni les lanzaré lo primero que consiga, ni les retaré a pelear en la esquina, entre otras conductas prehistóricas que aún son de uso cotidiano para dilucidar controversias.
Me limito a escuchar o leer sus verdades, a fin de buscar las coincidencias, debatir las diferencias y sintetizar los argumentos a objeto de que emerja la “verdad consensuada”, en el entendido de que este metafórico “aprendiz de chef”, podrá a ser un líder en su rubro, en la medida en que su producto agrade el “paladar cognoscitivo” de quién lo consuma, sin que medien imposiciones, amenazas o caprichos, surgidos de una paradójica autoridad, que arrastre a mi paradigma a fenecer con más pena que gloria.

Amor Ágape, en el Liderazgo - La Paradoja, James Hunter


Por: Neydis Janeth Rojas Agüero

Al leer el libro de la Paradoja fue de gran interés para mí la comparación que se hace del liderazgo con el amor como ágape, y surgieron ciertas interrogantes ¿es que para influir en mis subordinados debo amarlos? ¿para que trabajen con entusiasmo o motivados para el logro de las metas, debo sentir algo por ellos? ¿para qué simplemente, cumplan con sus responsabilidades y obligaciones debo quererlos y manifestárselo?
Si indagamos un poco sobre la definición del amor ágape nos encontramos con que “es el verdadero amor, el amor de Dios, el amor divino, el amor oblativo, este amor se basa en un nivel divino, ya que a través de este nuestro Dios muestra su verdadero amor. Nos muestra que tenemos que madurar o sea tener la capacidad de posponer gratificaciones para que exista una verdadera libertad para poder así tener una verdadera entrega. Sobre el “ágape” encontré pasajes bíblicos muy interesantes como:
"Dios es amor (ágape)", el tipo de amor que ama a quien no es amable, incluso a sus enemigos. Por otra parte, El eros se funda en la noción de necesidad. El ágape, en contraste, no se funda en ella, ni se alimenta por deseo de recompensa alguno.
Y aunque estemos claros que en la Paradoja no se trata de un amor de sentimientos o emoción sino de verbo, de amor de comportamiento y elección, si debemos estarlo que el cimiento esta en el mismo lugar, ya que el fin último es lograr relaciones humanas sanas, optimas, eficientes y satisfactorias para todos los involucrados.
La gran paradoja está en que “el verdadero líder es aquel que más sirve”, el que se entrega totalmente, el que está comprometido por “todos” en la organización, incluso sacrificándose, sin esperar gratificaciones, así se siente libre, feliz, al demostrar su amor con sus acciones y comportamiento”... qué difícil es ser un verdadero líder con amor ágape.
El amor según ágape es: paciencia, afabilidad, humildad, respeto, generosidad, indulgencia, honradez y compromiso. Como líderes de organizaciones, de aula, de hogares, de comunidades, estamos en la obligación de comportarnos bien con todos los que están a nuestro alrededor, incluso con los que no sentimos empatía, y esta conducta debemos enseñarla a nuestros hijos y estudiantes para rescatar y reforzar los valores y principios en decadencia en esta era posmoderna.
“Mis jugadores y mis asociados no tienen por qué gustarme, pero como líder tengo que amarlos. El amor es lealtad, el amor es espíritu de equipo, el amor respeta la dignidad del individuo. En esto consiste la fuerza de cualquier organización”. Vince Lombardi. La Paradoja (p.93)
El verdadero líder es aquel que sirve sin esperar nada a cambio, que inspira respeto en lugar de miedo en su gente, que aunque en algún momento no esté físicamente el personal conoce sus funciones y se siente seguro, que sabe comunicarse, toma decisiones acertadas, considera las opiniones y esfuerzo del grupo, que deja a un lado sus deseos y necesidades y busca las mejoras para los demás, es comprometido, respetuoso, honrado, ese es el verdadero líder!

LIDERAZGO Y CAMBIOS SOCIALES.


Por: MAXIMINA MORILLO.

James C. Hunter, es un asesor de una empresa dedicada a la formación empresarial de ejecutivos donde quiere transmitir la esencia de un verdadero liderazgo, que vaya de la mano con los cambios sociales que enfrentamos cada uno de nosotros, la sociedad actual exige mas atención, puesto que el ser humano como tal se valora mas, el MATRIMONIO, el ejemplo mas palpable, donde el liderazgo lo llevaba el padre, en la actualidad escuchamos con frecuencia decir, los matrimonios ahora no duran, simplemente cambio la forma sumisa y la mujer exige atención, cuidados, respeto. Se asume el fracaso y simplemente se intenta de nuevo.

Todo consiste en administrar esos cambios, es allí donde hablo de cambios de esquemas, cambios paradigmáticos a través de las condiciones que nos presentan las personas con quien compartimos, si somos nosotros los llamados a liderar. Como bien es definido el líder, es aquella persona que seguimos y donde por nosotros mismos no iríamos, entonces liderazgo, es el arte de influir sobre la gente para que trabaje con entusiasmo en la consecución de objetivos en pro del bien común.

Es allí donde se estrecha la relación entre paradigma y liderazgo, ya que el líder debe conocer su gente para en conjunto fijar normas, protocolos, sistema de trabajo donde siempre se tenga la certeza de mejorar. El líder debe tener la convicción de crear cambios de actitud positiva, esto lo logra si el cree en sus capacidades, siendo capaz de transmitir entusiasmo y la palabra mágica “AMOR”.

Mi amigo, James Hunter en su relato de la Paradoja, me da un “alto” para pensar en esa mágica palabra que siempre he tenido en mis labios como madre, AUTORIDAD, como madre de cuatro hijos varones, donde mi frase ha sido los llevo con autoridad.

Pues bien, un líder con autoridad es aquel que ante todo se reconoce por su ejemplo, como lo define el hermano Simeón en la Paradoja, “Es el arte de conseguir que la gente haga VOLUNTARIAMENTE lo que tu quieres debido a tu influencia personal. Y cuál es la mayor influencia que podemos dar a los demás nosotros mismos, nuestro actuar, nuestro vivir, nuestro propio reflejo, las acciones hablan por si solas.

Con autoridad logramos hacer muchas cosas voluntariamente el líder con autoridad refleja amor al prójimo, honradez, es ejemplar, anima, expositivo, amable y sobre todo comprometido con su entorno.

El otro tipo de líder que nace gracias a una situación determinada en un momento dado por el PODER, como su liderazgo no lo adquirió progresivamente, sino por imposición, no valora el rol que en su momento le toca desempeñar.

Para definirlo, Poder, es la capacidad de forjar o coaccionar o a alguien para que haga su voluntad, para mi es un líder mediocre que al terminar su labor determinada estará mas solo que cuando asumió.

El líder por poder, transmite miedo, rechazo pues como lo manifesté anteriormente, en esta sociedad que nos exige cambios, donde el ser humano se inclina hacia la paz, lo bonito, lo sublime.

El poder se asume por el momento que se vive, no hay convicción de que se puedan mejorar las cosas, prevalece la adulancia, ya que este líder solo despierta un interés momentáneo, los adinerados, los que ocupan cargos removibles de confianza caen en este tipo de líder ya que para ello no hace falta ni inteligencia, ni valor, solo la orden que el cree todos están en la obligación de cumplir.

Weber articula la diferencia entre autoridad y poder y luego de leerlo, reflexionarlo, se explica el porqué algunas organizaciones con las mismas funciones progresan y otras fracasan. Pues bien, aquí esta la respuesta “el líder” que cree en el amor a su prójimo y el que si cree en un mundo mejor, ese es el líder que nuestra sociedad exige y clama y quien mas que yo para ser parte de uno de ellos.